Chimichurri, porque nuestra carne sí tenía algo por mejorar
Una salsa de origen difuso es el acompañamiento ideal de la gastronomía de res porteña.

1. Ingredientes:

Sal gruesa, ajo, orégano, ají molido, vinagre de vino tinto y aceite de oliva.

2. Primero, el agua

Hervir una taza de agua en una olla, agregarle una cucharada de sal gruesa y mezclar hasta que esta se disuelva. Luego, anular el fuego y dejar reposar hasta que esté a temperatura ambiente. Primer paso resuelto: ya tenés lista tu salmuera.

3. A picar se ha dicho

Fino, fino y más fino. Arrancamos picando tres dientes de ajo y, al finalizar, lo volcamos en un bowl. Seguimos con dos cucharadas de orégano fresco y, para cerrar, otras dos de ají molido.

4. Báteme en cámara lenta

Con paciencia, mezclamos los ingredientes y paulatinamente agregamos vinagre de vino tinto y, luego, aceite de oliva. Una vez que veamos uniformidad en la salsa, le arrojamos la salmuera.

5. Un día de reposo

Para cerrar, guardamos nuestro chimichurri en un frasco con tapa hermética, lo envolvemos con papel de aluminio y, casi como un agradecimiento por lo que viene, lo dejamos descansar en la heladera durante 24 horas.

6. Sumale sabor a tus comidas

¡Ya preparaste tu primer chimichurri! Ahora dejate llevar por el mejor acompañamiento de la carne y echalo encima de tus próximos choripanes, bondiolas al plato y todo lo que te tiente.


Descubrir más sobre la gastronomía porteña.